Los tiempos cambian, la tierra se transforma y el ser humano también, la mujer hoy en día ha sufrido una transformación muy positiva se ha atrevido hacer su auto transformación y proyectar sus dones, habilidades, destrezas e inteligencia femenina, la conciencia femenina en este nuevo milenio ha despertado.
Desde los inicios de la creación, la mujer ha sido y es la dadora o la que provee a los suyos en todos los aspectos de la vida, si hacemos una observación detenida y objetiva podemos afirmar que la mujer juega un papel fundamental en la vida del hombre y la evolución.
La especie humana está conformada por dos géneros el masculino y el femenino dos energías distintas, opuestas pero vitales para la vida, por supuesto el género femenino es la mujer, la cual ha sido y es idolatrada y catalogada como una Diosa. También se puede decir que desde el comienzo de los tiempos, la mujer en las diferentes culturas cumplió roles de líder de familia, consejera, sanadora, guía espiritual, administradora, entre otras facultades.
La mujer es concebida como la suave pero a su vez dominante, intuitiva, emocional, capaz de dar vida para perpetuar la especie, siempre ha sido capaz de desarrollar estrategias para mantener su familia, sus hijos y hasta su consorte, ella ha evolucionado tanto que actualmente puede simultáneamente desarrollar diferentes roles en la cotidianidad social, lo cual ha traído una serie de conflictos con el género masculino, porque en la mayoría de las veces la mujer toma las acciones y decisiones que en otros tiempos eran netamente de hombres. La gran cantidad de parejas
separadas han sido porque no han manejado bien sus roles, los han manipulados, transferidos, distorsionados, cambiados, para que después a la final se cansan, compiten, generan caos y separación.
Actualmente la mujer está ocupando puntos clave en la política, en empresas, instituciones, universidades, naciones entre otros, manteniendo el liderazgo en su núcleo familiar. Es catalogada como una guerrera que gana todas las batallas del día a día, atiende a su familia, cumple con sus compromisos sociales y laborales, se instruye y complace a su pareja, toda una supermujer.
Pero a todas estas pregunto: ¿quién te complace mujer?, ¿eres tratada como una Diosa?, ¿Cuándo hay tiempo para ti?, ¿te ayudan o te cargan de responsabilidades que no son tuyas?, estas interrogantes te invitan a pensar ¿Qué? roles desarrollas en tu línea temporal y línea circular, en otras palabras en tu círculo familiar y laboral.
Hay muchos roles que la mujer se ha tomado, como por ejemplo: una mujer profesional, que trabaja y es casada, en su mayoría, toma el rol de madre de sus hijos, consejera, administradora del hogar, suegra, amiga y hasta madre del esposo, siempre en pro de mantener la armonía y el equilibrio en el hogar y muchas veces hasta el rol de sumisa para evitar maltratos y violencia domestica, solo por el hecho del miedo a quedarse sola. A todas estas es muy importante medir en qué nivel se encuentra la autoestima, ya que de allí depende el éxito o fracaso en el desarrollo de los roles, me explico de ejecutarlos sin dejar secuelas negativas, es decir tomar solo los que tu mujer puedas realizar sin estrés, sin imposición, sin violencia, para que así no quedes marcada por algo que no te toca ni te gusta hacer.
Recuerda no pretendas tomar un rol que no te corresponde, trata de identificar cual es el rol que estas desarrollando en este presente, analízalo y decide si quieres seguir o quieres cambiarlo.
Hasta la próxima semana.
Janitza Ramírez.
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